Gracias al aporte y autorización del autor,
Intermedio
Versión para NTC…
El último vuelo de la libélula
Jotamario Arbeláez
Hay
mujeres que nacen para hacer historia, y más aún ahora que hay tantos que
rechazan la historia que escribían los vencedores para que la leyeran los hijos
de los vencidos.
Es entonces cuando las heroínas y vencedoras
son ellas y la historia cambia de tono.
De entre las mujeres del nadaísmo, movimiento
al que nos metimos casi de niños encantados porque no sabíamos adónde nos iba a
llevar y mejor que no nos llevara,
destaco a estas alturas de la vida, a los 60
años de nuestro primer berrido, a dos almas que han sido bellas con todo y
cuerpo,
a Dina Merlini y Patricia Ariza, quienes han
sabido mostrar al mundo lo que significa ir montado en el potro sin riendas en
la poesía.
Fueron ellas quienes entraron primero con
medias negras y faldas cortas en los bares de Medellín, donde tradicionalmente
las únicas mujeres que accedían eran las coperas.
Parece
que fue antier ese día de la semana santa de 1961 cuando las conocí haciendo su
ingreso al Café Colombia de Cali, donde departía con Elmo Valencia,
recién llegadas de Medellín a seducirnos para
que viajáramos con ellas a tomar posesión de la isla de nuestros sueños, que
había adquirido otra nadaísta, Helena Restrepo,
en el océano Pacífico, mar adentro desde
Tumaco, para alejarnos de la civilización que nos apestaba.
Con Helenita venía también Herlinda, su
amante, y otros tres nadaístas recién reclutados.
De allí nació la legendaria novela del Monje Loco, Islanada, de la que 7 somos sus
fatales protagonistas.
Yo
tenía el compromiso de viajar a Bogotá a asistir al estreno de la obra de
teatro de Gonzalo Arango, Los nadaístas,
en el teatro Odeón.
Luego no podía acompañarlos, pero cómo, a
pesar de que la llama de la atracción me chamuscaba por dentro.
Quise hacer del cuerpo de Dina un poema que
perdurara para que perdurara ella y con ella yo, en la historia de la
literatura y de los mores fugaces.
En ese tiempo, a pesar de y precisamente por
no tener nada, nuestras ambiciones no eran modestas.
El poema-libro se llamaría El cuerpo de ella, y el plan era que me
posara desnuda para irla retratando ojo por ojo y diente por diente, de la
cabeza a los pies, de la cadera izquierda hasta la derecha.
Aceptó y en ello nos empeñamos jueves y
viernes santos. Mientras los demás se aprovisionaban de lo mínimo para el
éxodo.
Marcharon por Buenaventura rumbo a Tumaco y
luego a buscar la isla que no encontraron, por cuanto sufría de erosión marina
y permanecía seis meses sumergida y seis meses a flote. Llegaban en la época en
que la isla era Atlántida.
El
poema lo vine a encontrar treinta años más tarde, lo sacudí y con él gané el
Premio Nacional de Poesía del Distrito, lo tradujeron en París, en 2001
presenté la versión bilingüe en La Conciergerie y en la Unesco,
luego Zacarías Paine haría la versión
bilingüe español-inglés y Gustavo Mauricio García en Bogotá la edición
facsimilar con dibujos de Máximo Flórez para celebrar los 60 años del
movimiento.
Cedí a Dina los derechos que produjera. Pero
aunque aún no sabemos si nos va a generar la inmortalidad literaria como a
Petrarca y Laura, lo que sí ha sucedido es que en esta vida ha sido poca la
pecunia recaudada.
Volví
a encontrar a mis heroínas en Bogotá, participamos en la orgía fotográfica que
nos hiciera en el 64 el gran Nereo en las gradas del Capitolio y en la
cafetería de La casa del florero,
con Gonzalo Arango, Humberto Navarro, Elmo
Valencia, Eduardo Escobar, Darío Lemos, Barquillo, Fany Buitrago, Mario
Francisco Restrepo, Moisés Melo, Carmen Payón, Arturo Esguerra, y les fui
siguiendo el paso pues la amistad se consolidó para siempre.
Dina Merlini y Jotamario, 1963. Foto Nereo.
Desde el 70 toda la provincia nadaísta se
instaló en Bogotá, y Dina y Patricia consagraron su creatividad y talento al
teatro.
Desde entonces nos hemos mantenido como una
comunidad de iniciados en ese gran secreto que nos es vedado revelar, y que
sólo se nos permite sugerir a través de nuestros poemas.
Hace
más de 30 años Dina marchó a San Andrés, que ha sido un fortín nadaísta, con su
compañero el joven Iván a cumplir su frustrado sueño marino.
Ha vivido frente al mar en la localidad de
San Luis, donde continuó con sus actividades teatrales, y cuidando en el día
niños, perros y gatos
para entregarse con su amigo en la noche a la
invocación de Baco, Neptuno y supongo que también Eros.
Hasta que el tiempo fue erosionando la roca
de que fue hecha y terminó en el Ancianato de la isla, donde vive el reposo de
la guerrera.
Vigilada de cerca por esa particular criatura
que es una de las más viejas del mundo, la poética esponja marina Ceratoporella nicholsoni, anterior a la
especie humana,
que acaba de ser descubierta
en una caverna, robándose la atención de la isla.
Allí se ha dedicado a revisar los papelitos
de la vida, poemas y pinturas. A pedido de Patricia, que ha velado por ella, ha
preparado el libro de poemas que estamos presentando, Solaz atardecer y maravilla.
Una
vez preparado el libro me ha pedido unas palabras de prólogo, para que si El cuerpo de ella no nos concede la
inmortalidad nos la logre éste. A morir y a resucitar juntos, como se dice.
Casi todos se han ido yendo, este libro sería
una tabla de sobrevivientes. Patricia Ariza es la editora, y prologuista también como Satizábal
Carlos su poeta consorte.
A ella
le ha dicho cuando la visitó en su amable refugio de San Andrés que se apure,
que puede ser el último vuelo de la libélula. Me impresionó ese término, que
bien podría ser también el título de su libro.
Me hizo acordar de uno de los últimos
escritos de Henry Miller, Inmóvil como el
colibrí, donde lejos de las procaces expresiones de sus Trópicos iniciales, se extasía en el
susurro, en el albricias, en el batir de las alas frente a la flor.
Este libro de Dina es un adiós a las
estridencias, a las maldiciones sonoras, a la quejumbre.
Es el canto de gracia, la contemplación del
ensimismado en los atardeceres celestes, el paso de las escobas del tiempo y el
viento, el barajar de los sueños, la descripción de los meteoros con el corazón
perplejo, el vestido de luz para recibir la hostia del sol.
Acabo
de llamarla por el teléfono para decirle que estoy terminando el prólogo y
felicitarla por la frase de la libélula
y en ese momento sonó el tún de un pájaro que
se acababa de estrellar contra el vidrio de su ventana.
Colgamos, y le quedó sonando en el auricular
el toque de una ocarina. Exactamente como suena su poesía.
Bogotá,
Febrero 15, 2019
La
presentación del libro tendrá lugar en el
Banco de la República de San Andrés,
el
jueves 25 de Julio, a las 4 p.m,
en reunión amorosa programada por
Patricia Archbold y María
Matilde Rodríguez.
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MENSAJES:
De:
Luis Alfonso Ramírez. Boston, MS, Julio
22/19
Date: mar., 23 jul. 2019 a las
0:10
Subject: Re: Dina Merlini libro
To: J. MARIO ARBELAEZ
Cc: ntcgra@gmail.com ntcgra@gmail.com ET AL
Hola Poeta querido, que linda página
que enmarca todo el valioso tesoro que es tu “memoria” y más que ella tu
inmenso corazón que generoso escribe día a día los más insospechados recuerdos
de quienes hemos tenido la fortuna de compartir contigo uno o muchos momentos
de nuestra existencia.
Pareciera que la Providencia te
hubiese entregado la pluma indeleble que plasma en prosa o poesía la
remembranza de un largo día que va del San Nicolás caleño en los “40” al tranquilo
crepúsculo de la Villa de Leyva, donde con tu amada Claudia nos sorprendes
INMENSO.
Un fraternal abrazo, Luis
Alfonso Ramírez.
Boston, MS, Julio 22/19
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De: J. MARIO ARBELAEZ
Date: lun., 22 jul. 2019 a las
23:14
Subject: Dina Merlini libro
To: ntcgra@gmail.com
CC: patricia archbold bowie,
Patricia Ariza, ARMANDO ROMERO, Eduardo escobar, Jaime Jaramillo escobar,
pablus gallinazo, alvaro medina, Alfredo rey, Sandro Romero salvador arbelaez, Salome Arbelaez Jaramillo ,
jan karb, elizabeth arbelaez, Elizabeth torres,
Michelle alexandra Rincon Cardona, johana.carvajal, Mariana Ossa Zapata,
atahisca, Farideh Jackaman, ALEXA TABOADA, Hernán Correa, ramón cote, federico
díaz granados, josé angel leyva, josé Zuleta ortiz, José Luis Díaz-Granados,
luis lahoz, enrique sánchez, fernando rendón, lucía estrada, Gustavo Mauricio
García, Gustavo Restrepo, juan domingo guzmán, luis alfonso ramírez, Fernando
Guinard
CC:
Queridos Gabri y Marisa:
Quién iba a predecir estos
rituales nadaístas de la vejez y de la ternura. Eduardo Escobar lo dijo hace
muchos años: Quien iba a pensar que el nadaísmo terminaría en una patota de
viejitos. Jajá.
Les va con un abrazo, y para los mejores amigos.
Les enviaré el libro. Jotamario
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De: NTC ntcgra@gmail.com
Date: mar., 23 jul. 2019 a las 10:37
Subject: GRAcias. Eneteceado. ... Fwd: Dina Merlini libro
To: J. MARIO ARBELAEZ
Date: mar., 23 jul. 2019 a las 10:37
Subject: GRAcias. Eneteceado. ... Fwd: Dina Merlini libro
To: J. MARIO ARBELAEZ
"El largo día que va del San
Nicolas caleño en los “40” al tranquilo crepúsculo de la Villa
de Leyva ... " *
Querido Jota, líder y escribano de "la patota
de viejitos nadaístas" :
Qué bello y significativo el amoroso recorrido que haces en
el texto sobre el libro de la inolvidable Dina
"Solaz atardecer y maravilla" (El último vuelo de la
libélula).
Ya lo publicamos (enteceamos) en nuestro blog : https://ntc-libros-de-poesia.blogspot.com/2019_07_23_archive.html
Qué alegría saber lo del lanzamiento del libro en nuestra
Isla en donde, sin duda, ese día se sentirán las vibraciones hasta
de
"la poética esponja marina Ceratoporella nicholsoni" .
Qué bueno haber podido estar presentes. (Nuestro jet privado
anda cojo de una pata). Felicitaciones y éxitos. Abrazos para
todos.
* Compartimos el texto del mensaje del joven Luis
Alfonso Ramírez ...
GRAcias por la generosa oferta del envío del libro!
Esperamos la joya!!!
Amigos, Gabriel , María
Isabel y NTC …
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NTC ... ACTUALIZACIONES y SEGUIMIENTOS a julio 26, 2019:
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NTC ... ACTUALIZACIONES y SEGUIMIENTOS a julio 26, 2019:
"El mensaje nadaísta está
más vivo que nunca", Dina Merlini
EL ISLEÑO, Viernes, 26 de Julio
de 2019 05:36
Por Eduardo Lunazzi
EL ISLEÑO, San Andrés Isla,
Colombia,
Viernes, 26 de Julio de 2019 05:36
Matriz: http://www.xn--elisleo-9za.com/
Fotos: Janeth Raga
Este 25 de julio se realizó la
esperada presentación del libro 'Solaz Atardecer y Maravilla' de la poeta
nadaísta, Dina Merlini, coincidiendo con los 60 años de existencia de este
movimiento, y confirmando una vez más –como lo asegura Jotamario Arbeláez, uno
de sus más representativos mentores– que la filosofía que lo inspiró está más
viva que nunca.
En efecto, las voces de Merlini y
Arbeláez, guiadas por el idóneo hilo conductor de María Matilde Rodríguez,
directora de 'Mamá Roja Company', organizadora del evento, entregaron un
estupendo conversatorio pleno de matices y texturas dramáticas, a la altura de
una obra de brillante factura, como el libro en mención.
Tras una lectura llevada a cabo
por amigas leales de la autora, los protagonistas hablaron de todo: relataron
anécdotas de su trasegar junto a otros destacados escritores; evocaron sus
genuinas luchas –porqué su andar no siempre fue un jardín de rosas para estos
poetas iconoclastas– y desde luego, cantaron sus versos del alma.
El de este jueves, es uno de
tantos eventos que se emprenden como preámbulo a la tercera edición de la Feria
Insular del Libro (FILSAI), ‘La Raya en el Ojo’, a realizarse el próximo mes de
septiembre y que este año tiene como lema: ‘El paisaje es humano’.
Apoteosis de la vida
A Merlini, que ronda los 70 años,
se la vio activada y agitando sus brazos al compás de los Rolling Stones (que
sonaron de fondo, como una fiesta más) y cantando a capella el
tango 'La Pastora'.
Por lo demás, fuera de leer
orgullosa su poemario, respondió entre uno y otro, preguntas de los asistentes
al auditorio del Banco de la República.
“La poesía siempre ha sido mi
refugio”, le reveló a alguien. También tuvo un momento para describir la
situación actual de las islas que atribuyó en parte a la ausencia de valores
vitales como la solidaridad.
Por último, le dijo a alguien:
“El nadaísmo está vivo y seguirá estándolo, porque es la búsqueda incesante del
hombre detrás de un interrogante esencial: ¿Qué hacemos aquí?”.
Y, como bien complementó el
inagotable Arbeláez: “estamos aquí y seguiremos estando porque el nadaísmo es
el único movimiento que sobrevivió a la muerte de las ideologías”
El coro del tema ‘Start me up’ de
los Stones, que irrumpió al final de la velada, sonó a confirmación:
If you start me up, I'll never
stop
Never stop, never stop, never stop…
Never stop, never stop, never stop…
Fotos: Janeth Raga
Gracias al aporte y autorización del autor,
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